Primera Parte: El resurgir de las letras

El poeta estaba triste. Lloraba una perdida. No era que su amada se había ido ni que estaba solo ¿O sí?. Sus lágrimas eran porque la inspiración se había ido. La nostalgia lo invadía pero no podía escribir. Tal vez era qué las ideas lo habían abandonado ya que él un día las desprecio rompiendo los papeles y diciendo que lo que escribía no tenía sentido. ¿Las letras se sentían traicionadas porque él las había negado con los seres negros de la ignorancia? Lo iba a averiguar investigando su ser con humildad.